Vinculando y potenciando
¡Qué muchas personas solo sobreviven!
Sobrevivir en sí mismo no está mal, es lo que toca a cada ser vivo. Ahora bien, cuando estás en modo automático, solo vas de un lado para otro sin sentir o disfrutar la vida. Al menos a mí no me parece vivir y por eso expreso sobrevivir. Lo ideal es que puedas disfrutar la vida en cada cosa que haces.
A veces, las personas están en modo de sobrevivencia porque no han podido vincularse con su propósito o potencial. Ese vínculo se comienza a potenciar cuando se identifica y continúa ese proceso en la medida que se conecta con tu diario vivir.
¡Qué muchas relaciones se rompen!
Hay relaciones que deben romperse, porque evitan en crecimiento de las partes involucradas. El detalle es que hay muchas otras, particularmente en los lugares de trabajo, que ni tan siquiera han logrado vincularse y mucho menos potenciarse. Las relaciones con vínculos sanos y potenciados son la clave de cualquier equipo de trabajo, culturas sostenibles y negocios exitosos.
¡Qué poca salud física y mental se percibe!
Hay tiempo para todo excepto para la salud. No hay tiempo para comer bien, hacer ejercicios, dormir. Menos para conversar desde la calma y con el propósito de construir relaciones desde la comprensión, empatía y entendimiento mutuo.
Es posible vincularte con prácticas saludables contigo y tus relaciones. Estas pueden ser potenciadas dentro de tus responsabilidades.
¡Qué muchas ideas se quedan en el aire!
Esto puede ocurrir porque faltó vincularlas con otras ideas o potenciarla con un plan eficiente de implementación. Sean estas ideas dentro de negocios existentes, para crear nuevos negocios o vincular negocios distintos, pero complementarios.