Colaboración especial: René Marty Lugo, PhD para Socious – Organizational Development Consultants junto a la Dra. Joyce González-Domínguez
Frente a las políticas anti-LGBT+ que han surgido recientemente en Puerto Rico, Estados Unidos y otras partes del mundo, presenciamos un intento claro de invalidar la existencia de las personas pertenecientes a minorías sexuales y de género. Se percibe un retroceso frente a los avances legales y sociales alcanzados. Esta situación se evidencia en experiencias cotidianas como la negación de servicios en oficinas gubernamentales, dificultades para la adopción, y la negación de identidades diversas, entre otras.
Estas políticas también se reproducen en los espacios organizacionales, donde múltiples manifestaciones de violencia son vividas por este colectivo. En este contexto hostil, surge una pregunta inevitable: ¿Es posible combatir las violencias que enfrentan diariamente las personas LGBT+ en la sociedad y el entorno laboral?
Aunque la respuesta inmediata podría parecer un rotundo “no”, producto del pesimismo o del miedo paralizante, lo cierto es que existen formas concretas de resistencia, acción y transformación.
¿Qué violencias enfrentan las personas LGBT+ en el trabajo?
Numerosas investigaciones han documentado cómo las personas LGBT+ han sido históricamente víctimas de violencias en sus espacios laborales. Estas se intensifican en contextos donde se sienten legitimadas por políticas excluyentes. Algunas de las formas más comunes incluyen:
🔹 Acoso sexual Siete de cada diez personas LGBT+ experimentan acoso sexual en el trabajo, pero muchas no lo reportan por temor a las repercusiones que implicaría revelar su identidad sexual (Equality and Human Rights Commission, 2020).
🔹 Discriminación y despido La transfobia y homofobia pueden manifestarse a través de actos de discrimen que, en ocasiones, resultan en despidos. Algunas personas, como hombres gais, sienten la necesidad de “hipermasculinizarse” para evitar sospechas (Mennicke et al., 2018).
🔹 Invalidación de pronombres Las personas trans y no binarias enfrentan con frecuencia la negación del uso de sus pronombres y nombres elegidos, lo que representa una forma de violencia simbólica que atenta contra su identidad (Marty, 2023).
🔹 Violencia en el acceso a servicios sanitarios Cuando la expresión de género de una persona no se ajusta a las expectativas sociales, esta puede enfrentar exclusión y estigmatización al usar los baños u otros espacios, asociando su identidad con conductas sexuales inapropiadas.
Actualmente, más de 597 proyectos de ley anti-LGBT+ se han propuesto en Estados Unidos, muchos de los cuales siguen avanzando. Esta tendencia refleja una intención preocupante: invisibilizar a las minorías sexuales y de género y limitar libertades civiles fundamentales, incluida la libertad de expresión y el reconocimiento de derechos en el trabajo.
¿Cómo podemos combatir estas violencias?
Las personas LGBT+ han ganado su espacio a través de la lucha, pero esta lucha no es gratuita. Es una condición que muchas veces garantiza su propia supervivencia. Como bien expresa la autora y activista trans Elizabeth Duval, a veces sentimos que la lucha forma parte de nuestra existencia.
Aquí tres maneras concretas de combatir estas violencias:
🔸 1. El silencio no siempre es opción Aunque no todas las respuestas deben ser inmediatas, el silencio no puede ser nuestra única estrategia. Informarnos, consultar con personas de confianza y actuar con asertividad puede ser el primer paso para combatir la violencia recibida.
🔸 2. Elegir la trinchera de batalla Tener un espacio seguro, donde podamos expresarnos y defendernos desde nuestras fortalezas, es fundamental. Las trincheras pueden ser físicas, emocionales o simbólicas. Desde ahí podemos resistir y transformar.
🔸 3. La repetición como resistencia A veces cansa repetir quiénes somos, lo que creemos y defendemos. Pero es necesario. La repetición no parte de una novedad absoluta, sino de la necesidad de hacernos presentes. Como plantea Dobre (2020), repetir también es resistir.
Reflexión final
Estas estrategias no son absolutas. Cada persona elegirá cómo manejar lo que enfrenta. Pero todas parten de una lógica de acción frente a la inacción, de voz frente al silencio. Reconocemos que el silencio también puede ser un mecanismo de protección o escape del dolor… pero, ¿puede ser siempre nuestra respuesta?
En tiempos donde se intenta negar nuestra existencia, ser visibles es también una forma de lucha.
Referencias:
Dobre, C. E. (2020). La repetición: Un escrito sui generis en la autoría de Søren Kierkegaard.
Tópicos, Revista de Filosofía, (59), 275–300. https://doi.org/10.21555/top.v0i59.1124
Equality and Human Rights Commission. (2020). Sexual harassment and harassment at work.
https://www.equalityhumanrights.com/sites/default/files/sexual_harassment_and_harassment_at_wor
k.pdf
Marty-Lugo, R. (2023). Experiencias sobre las manifestaciones de violencias que enfrentan las
personas no binaries en el trabajo y en la sociedad: Un estudio fenomenológico (Disertación
doctoral). Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. ProQuest Dissertations &
Theses Global.
Mennicke, A., Gromer, J., Oehme, K., & MacConnie, L. (2018). Workplace experiences of gay and
lesbian criminal justice officers in the United States: a qualitative investigation of officers
attending a LGBT law enforcement conference. Policing and Society, 28(6), 712–729.